Arquitectura efímera de impacto duradero en Laredo.

01/08/10 - El Diario Montañés

Berto Martínez logra, mediante el uso de innovadores efectos, 'inundar, quemar e incluso derrumbar' el Centro Doctor Velasco.

Magia, simulación, tecnología o de todo un poco. Unos días después, todavía hay gente en Laredo que no olvida el espectáculo 'Arquitectura Efímera' con el que el laredano Berto Martínez, sorprendió y, a veces, sobrecogió a los centenares de asistentes que, durante tres días consecutivos, muchos repitieron, asistieron a la puesta en escena de este novedoso montaje en los jardines de la Casa de Cultura.Efectos en tres dimensiones proyectados sobre la fachada trasera del edificio de centro Doctor Velasco a modo de lienzo incluido en la creación luminosa.

La actividad, desarrollada en el marco de la Semana Cultural Europea, promovida por el Punto de Información Europeo, recoge el trabajo de seis meses de un equipo liderado por Berto Martínez y el colectivo 'Skene Creación', respaldados por la Asociación Cultural San Rock-e. Esta novedosa técnica artística de gráficos computacionales, que recibe el nombre de Mapping, permite llevar en volandas al espectador en un viaje en el que realidad y ficción confunden continuamente sus fronteras. Gracias a la performance sobre la casa de cultura, las formas, volúmenes, cornisas, vanos, espejos, y otros elementos del edificio se utilizaron como parte del espectáculo, dando pie a una sucesión de efectos espectaculares.

En veinte minutos de inmersión virtual, los espectadores vieron cómo el centro cultural era inundado, quemado, encerrado e incluso derribado. Un espectáculo en el que luces y sombras, desplegadas al ritmo de una música perfectamente sincronizada con la escena, permitieron recrear ilusiones ópticas que cautivaron por su realismo. Una gigantesca criatura modelada en 3 dimensiones oteaba desde las alturas a un público rendido ante la estampida de libros a la espera de uno de los efectos más conseguidos: la irrupción de un misterioso personaje en la biblioteca que, amparado en el anonimato de la noche, ilumina la estancia mientras sus pasos resuenan en un jardín envuelto en un estremecedor silencio, evidencia del embrujo del montaje. Las prolongadas ovaciones al término de la proyección, seguida de una sucesión de cortometrajes y un concierto de jazz, mostraron la buen acogida que el espectáculo tuvo entre los asistentes.


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